Dorama: Un litro de lágrimas
Título original: Ichi Rittoru no Namida
Director: Murakami Masanori
Intérpretes: Sawajiri Erika, Yakushimaru Hiroko, Nishikido Ryo, Jinnai Takanori, Narumi Riko, Fujiki Naohito, Koide Saori, Sanada Yuma,
Nacionalidad: Japón
Género: Drama
Episodios: 11
Año: 2005
Fansub: Japan Service, Yashin fansub
Puntuación: 8,5
Reseña: Ikeuchi Aya es una chica de quince años que acaba de aprobar el examen de acceso del instituto al que deseaba acceder. Además de por la enseñanza, una de las razones por las que quería estudiar allí era para incorporarse al equipo de baloncesto, ya que es muy buena jugando a dicho deporte.
La familia de Aya regenta una tienda de Tofu, en la que todos ayudan cada día, aunque su madre tiene su propio trabajo como asesora de la salud. Los Ikeuchi son una familia muy unida y los padres se preocupan especialmente por sus tres hijos; aunque no tienen mucho dinero, siempre intentan cubrir todas sus necesidades dentro de sus posibilidades. Por ello, cuando Aya comienza a tropezar y a caérsele cosas de las manos, su madre la observa detenidamente y no duda en llevarla al hospital para hacerle una revisión médica.
Los resultados del reconocimiento son fatídicos, ya que el médico le diagnostica degeneración espinocerebral, una enfermedad incurable por la que, entre otros síntomas, el paciente pierde movilidad en sus piernas, brazos y afecta a sus cuerdas vocales. El impacto de la noticia hará que la madre de Aya decida mantener en secreto su enfermedad, pero finalmente será la propia Aya la que se de cuenta por sí sola que su cuerpo no responde adecuadamente, ya que su enfermedad está avanzando más rápido de lo normal.
Esta historia está basada en hechos reales, concretamente en la vida de Kitou Aya, una chica que padeció esta enfermedad neurológica y que, finalmente, murió en 1988 a los 25 años. El diario de Aya fue publicado bajo el nombre Ichi Rittoru no Namida, un relato interesante para aquellos que disfrutaron del dorama, ya que se cuenta la verdadera historia, puesto que realmente Aya tenía otro hermano más y el personaje de Haruto, su amigo íntimo en el dorama, nunca existió.
Otro de los aspectos que valoramos positivamente en un dorama o película es la banda sonora, ya que una buena música de fondo muchas veces mejora la intensidad de las escenas. En el caso de este dorama, los temas principales Kona Auki, Only Human y San gatsu kokono ka, son perfectos para ambientar esta historia tan profunda y emotiva.
Lo que menos nos ha gustado ha sido la inexistencia de besos y abrazos entre la pareja protagonista. Por una parte, no es que fuera necesario puesto que contiene otro tipo de muestras de cariño muy emotivas y por la evolución de la relación tampoco resulta extraño. Pero a modo personal, nos parece lo más normal que una pareja se bese y se abrace cuando hay sentimientos y, en más de alguna escena, habría quedado mucho mejor.
Un litro de lágrimas es una de las series más dramáticas y conmovedoras que hemos visto. Ser partícipes de cómo se derrumba la vida de una chica tan joven a causa de una enfermedad, cómo se vuelca la familia en apoyarla y ver la degeneración de su cuerpo, son temas tan delicados y tan extremos, que solo de pensar que le puede tocar a cualquiera se nos pone la piel de gallina. No obstante, la fortaleza que muestra la protagonista nos ofrece una gran lección de superación que nos ha hecho reflexionar sobre lo verdaderamente afortunados que somos por gozar de buena salud. Por ello, pensamos que es un dorama que puede gustar a todos los públicos, aunque advertimos que por muy duros que seáis, se os encogerá el corazón en más de una escena.
Título original: Ichi Rittoru no Namida
Director: Murakami Masanori
Intérpretes: Sawajiri Erika, Yakushimaru Hiroko, Nishikido Ryo, Jinnai Takanori, Narumi Riko, Fujiki Naohito, Koide Saori, Sanada Yuma,
Nacionalidad: Japón
Género: Drama
Episodios: 11
Año: 2005
Fansub: Japan Service, Yashin fansub
Puntuación: 8,5
Reseña: Ikeuchi Aya es una chica de quince años que acaba de aprobar el examen de acceso del instituto al que deseaba acceder. Además de por la enseñanza, una de las razones por las que quería estudiar allí era para incorporarse al equipo de baloncesto, ya que es muy buena jugando a dicho deporte.
La familia de Aya regenta una tienda de Tofu, en la que todos ayudan cada día, aunque su madre tiene su propio trabajo como asesora de la salud. Los Ikeuchi son una familia muy unida y los padres se preocupan especialmente por sus tres hijos; aunque no tienen mucho dinero, siempre intentan cubrir todas sus necesidades dentro de sus posibilidades. Por ello, cuando Aya comienza a tropezar y a caérsele cosas de las manos, su madre la observa detenidamente y no duda en llevarla al hospital para hacerle una revisión médica.
Los resultados del reconocimiento son fatídicos, ya que el médico le diagnostica degeneración espinocerebral, una enfermedad incurable por la que, entre otros síntomas, el paciente pierde movilidad en sus piernas, brazos y afecta a sus cuerdas vocales. El impacto de la noticia hará que la madre de Aya decida mantener en secreto su enfermedad, pero finalmente será la propia Aya la que se de cuenta por sí sola que su cuerpo no responde adecuadamente, ya que su enfermedad está avanzando más rápido de lo normal.
Esta historia está basada en hechos reales, concretamente en la vida de Kitou Aya, una chica que padeció esta enfermedad neurológica y que, finalmente, murió en 1988 a los 25 años. El diario de Aya fue publicado bajo el nombre Ichi Rittoru no Namida, un relato interesante para aquellos que disfrutaron del dorama, ya que se cuenta la verdadera historia, puesto que realmente Aya tenía otro hermano más y el personaje de Haruto, su amigo íntimo en el dorama, nunca existió.
Otro de los aspectos que valoramos positivamente en un dorama o película es la banda sonora, ya que una buena música de fondo muchas veces mejora la intensidad de las escenas. En el caso de este dorama, los temas principales Kona Auki, Only Human y San gatsu kokono ka, son perfectos para ambientar esta historia tan profunda y emotiva.
Lo que menos nos ha gustado ha sido la inexistencia de besos y abrazos entre la pareja protagonista. Por una parte, no es que fuera necesario puesto que contiene otro tipo de muestras de cariño muy emotivas y por la evolución de la relación tampoco resulta extraño. Pero a modo personal, nos parece lo más normal que una pareja se bese y se abrace cuando hay sentimientos y, en más de alguna escena, habría quedado mucho mejor.
Un litro de lágrimas es una de las series más dramáticas y conmovedoras que hemos visto. Ser partícipes de cómo se derrumba la vida de una chica tan joven a causa de una enfermedad, cómo se vuelca la familia en apoyarla y ver la degeneración de su cuerpo, son temas tan delicados y tan extremos, que solo de pensar que le puede tocar a cualquiera se nos pone la piel de gallina. No obstante, la fortaleza que muestra la protagonista nos ofrece una gran lección de superación que nos ha hecho reflexionar sobre lo verdaderamente afortunados que somos por gozar de buena salud. Por ello, pensamos que es un dorama que puede gustar a todos los públicos, aunque advertimos que por muy duros que seáis, se os encogerá el corazón en más de una escena.
7 comentarios:
Este lo tenemos apuntado para ver más adelante. Ahora estamos con Sekachû que es bastante parecido (bueno, más o menos XD) así que cuando lo terminemos espaciamos un poco y nos ponemos con este, que tiene muy buenas críticas.
La historia tiene muy buena pinta... seguro que me hace llorar (con lo llorica que soy XD).
Lo que comentáis de la inexistencia de besos y abrazos me ha hecho gracia, es que normalmente los japoneses son bastante sosos para esas cosas (a penas hay besos y abrazos y si los hay, los besos son "besos pared"), en cambio los coreanos son algo más pasionales XD. Pero bueno, eso es tema cultural, son así. Cuando mi madre ve con nosotros algún dorama le "impacta" que una pareja al darse la mano se ponga nerviosa, cuando en nuestra cultura apenas tiene significado.
Al final he terminado hablando de otra cosa, perdón XD (menudo día llevo ^^u).
¡Saludos!
Para mí es uno de los mejores doramas que he visto y dudo que haya muchos que lleguen a superarlo. Está perfectamente llevado y se nota el cuidado que han tenido a la hora de tratar un tema tan delicado. Eso sí, el título le va como anillo al dedo, qué llorera me pegué... Hay que verlo estando predispuesto a lo que uno se va a encontrar, sino...
Está bien la serie, yo es que me he dado cuenta de que no soy mucho de Doramas pero éste si me lo vi entero (a mi parecer sobraban algunos capitulos... pero en fin ^^). Aunque de temática dramática y eso, me gustó más Koizora ^^
Lo tenia apuntado, pero...lo borré, es que a mi los dramas de enfermedades me pueden, no soy capaz...sé que me pierdo algo muy grande, pero...no doy.
A este titulo lo estoy ignorando casi más de un año, me da un poco de miedo verla, más que nada por lo emotiva que pueda llegar a ser. Sé que lo veré pero aún me sigo negando, creo que no quiero ponerme triztona :/
Lo tengo apuntado desde hace tiempo, a ver cuándo cae.
Bini, ese dorama no lo he visto, aunque me lo apunto, ya leí la reseña en tu blog y me gustó ;)
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