Título original: Brazen and the Beast
Autora: Sarah MacLean
Género: romántica histórica
Traducción: María José Losada Rey
Editorial: Versátil (enero 2021)
Origen: EEUU
ISBN: 9788412272543
Páginas: 432
Puntuación: 7,5
Reseña: Ambientado en Londres 1837, Lady Hattie es una solterona que sueña con heredar el negocio de su padre. Para conseguirlo, ha ideado un plan infalible al que se refiere como el Año Hattie. Sin embargo, cuando está a punto de iniciar su plan se cruza en su camino un atractivo y peligroso hombre llamado Bestia, con quién hará un trato de lo más indecente.
Lady Hattie y la bestia es la segunda entrega de la trilogía Los Bastardos Barecknuckle, cuyo argumento se centra en el hermano Bestia. Con este título, además de conocer la historia personal de este bastardo, también podremos ahondar en la infancia de los Barecknuckle y la relación que mantenían con su padre.
Estamos ante una novela histórica contemporánea con una protagonista adelantada a su tiempo que se niega a perder el negocio familiar simplemente por ser mujer y busca una alternativa para conseguir su objetivo. En principio, todos los planes que incluye el Año Hattie son comprometidos y de dudosa reputación, pero igualmente nuestra protagonista luchará por conseguirlo. A grandes rasgos, nos encontramos con un argumento que promete muchos movimientos estratégicos, impedimentos y acción. En ese sentido, Lady Hattie es una mujer que no defrauda pues, pese a todas las trabas que se va encontrando en el camino, consigue salir ilesa por ser resolutiva, inteligente y luchadora.
Lógicamente, el mayor peso de la trama recae en la parte romántica y os puedo asegurar que la he disfrutado a tope. Aunque Lady Hattie es una joven inexperta en las artes amatorias, tan sólo conocer a Bestia nuestra protagonista se vuelve loca por él. Es cierto que estamos ante un instalove que arranca con una atracción sexual sin medida pero, esta intensidad irrefrenable es la que le aporta ese toque canalla. El romance me ha encantado porque entre ellos existe el típico tira y afloja, se respira la tensión sexual y la pareja tiene muchísima química. Además, se trata de una novela que contiene escenas explícitas de encuentros íntimos y, en general, toda la relación me ha parecido muy intensa en todos los sentidos.
Los negocios de Bestia y Hattie también son fundamentales en esta historia, ya que el trato al que llegan está ligado directamente con ellos. Bestia es un tipo poderoso y temido que tiene que guardar su reputación y es muy excitante ver cómo sus principios se tambalean con la aparición de Hattie. Además, esta historia no está exenta de peligros, ya que tendrán que lidiar con enemigos, trampas, amenazas y venganzas.
En cuanto a los personajes, el perfil de Lady Hattie me ha encantado por ser una mujer con ideas propias, valiente, optimista y fuerte. Es cierto que tiene algunos complejos por no tener un físico como dicta los cánones de belleza de la época y ser una solterona a su edad, pero es tan tremendamente inteligente e inspiradora que esas cualidades ya la hacen brillar por sí sola. Por su parte, Bestia es un tipo altivo, duro e impetuoso, pero cuando lo conoces descubres que es adorable y carga con una gran mochila de su pasado. La pareja que forman es muy explosiva, pues además de ardientes, también resulta muy divertido ver cómo se retan, se acercan, se separan o se enzarzan en una guerra de egos de lo más chispeante.
Con esta novela, Sarah MacLean me ha conquistado con su narrativa tan directa, sencilla y ágil. Me lo he pasado estupendamente con el salseo de sus tramas, los diálogos tan intensos y la tensión del romance. La verdad es que es un libro muy adictivo por todo lo que ocurre y, sin duda alguna, la joya de la corona es la pareja tan maravillosa que forman los protagonistas.
En definitiva, Lady Hattie y la bestia es una novela romántica, divertida y sexy en la que además de vivir una historia de amor, también acompañaremos a su protagonista en una trepidante aventura por conseguir su objetivo. Una novela con diálogos chispeantes, adictiva y con un protagonista que emana sexualidad por cada poro de su piel.
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