El Castillo Ambulante

Título: El Castillo Ambulante
Título original: Hauru no ugoku shiro
Director y Guión: Hayao Miyazaki
Categoría: Película animación
Género: Fantasía
País: Japón
Año: 2004
Estudio: Estudio Ghibli
Música: Joe Hisaishi
Duración: 119 min.
Puntuación: 8,5

Reseña: Sophie es una joven que vive inmersa en su trabajo. Se dedica a coser sombreros en la tienda que su padre le dejó cuando falleció. Pese a su corta edad, es una chica ensimismada, con una autoestima baja y sin apenas ilusión por nada. Por ello, no le afecta los comentarios de que el castillo de Howl esté deambulando por los alrededores. Sin embargo, las mujeres están asustadas porque el temible mago Howl se dedica a raptar a las chicas guapas para robarles el corazón.

En una de las pocas ocasiones que Sophie sale a pasear por el pueblo, tiene un desafortunado encuentro con unos soldados que intentan acosarla. Sophie saldrá indemne gracias a la aparición de un misterioso caballero. Sin embargo, el peligro les sigue acechando, pues unos seres oscuros empiezan a perseguirlos por las estrechas calles de la ciudad. Como si de un sueño se tratase, Sophie y el apuesto joven logran escapar caminando por el cielo.

Sophie todavía está absorta por lo sucedido con el misterioso joven cuando, una inesperada visita se presenta en la sombrerería. Una mujer de aspecto seboso y actitud soberbia, la Bruja del Páramo, le echa una horrible maldición; la convierte en una anciana. Sophie intenta no caer en la desesperación y superar con valentía la terrible situación. Así, decide huir de su casa, hacia las afueras de la ciudad, con el fin de romper el hechizo que se cierne sobre ella.

Finalmente, Sophie acaba entrando en el castillo ambulante. Allí tendrá la oportunidad de tratar con sus singulares inquilinos, Calcifer y Markos, que la invitarán a pasar la noche. Cuando Howl regresa, Sophie le dice que se va a quedar a trabajar como criada en el castillo. A partir de entonces, Sophie podrá conocer más a fondo al misterioso mago y al maravilloso mundo de fantasía que lo rodea.

En El Castillo Ambulante, Miyazaki vuelve a aportar espléndidos paisajes adornados con una apacible banda sonora, siempre acorde con la ambientación de drama que se esconde bajo esta historia de fantasía. En esta ocasión, se ha dedicado a profundizar en los sentimientos e inquietudes que presenta cada personaje. Ha dotado a cada uno con personalidades muy desarrolladas y de gran fortaleza, aunque en el fondo, todos ellos esconden secretos que les impiden, de alguna forma, ser felices.

El Castillo Ambulante está basado en una novela, de Diana Wynne Jones, que el magnífico Miyazaki se encargó de adaptar con su particular originalidad. Es una animación, con un contenido repleto de fantasmas y extrañas criaturas, que nos recuerda a grandes obras como El Viaje Chihiro, La Princesa Mononoke o Mi Vecino Totoro. Sin embargo, en algunos momentos se hace lenta y su argumento no es lo suficientemente cautivador.