Cuando reescribamos la historia

Libro: Cuando reescribamos la historia

Título original: Cuando reescribamos la historia
Autora: Belén Martínez

Género: Juvenil
Editorial: Puck (mayo 2019)
Año: 2019

Origen: España
ISBN: 978-84-92918-61-4

Páginas: 352

Puntuación: 8

Reseña: Julen es un becario que intenta pasar desapercibido aunque no le guste cómo le trata su jefe. Una noche cuando sale del trabajo, Julen asiste con su mejor amiga Melissa a una reunión de antiguos alumnos donde se reencontrará con su amigo de la infancia Ibai. 

Hace diez años, Ibai asesinó a una persona y ha pasado todo este tiempo en la cárcel, así que cuando Julen lo ve no sabe cómo actuar y, más aún, cuando éste se acerca y le entrega un diario en el que se explica todo lo ocurrido. Al llegar a casa, la madre de Julen le informa que Ibai está a punto de morir tras intentar suicidarse, pero nuestro protagonista no llega a tiempo para ver a su antiguo amigo con vida. Sin poder hacer nada, Julen se acuesta a dormir pensando que ojalá pudiera reescribir la historia.

Cuando reescribamos la historia es la segunda novela que leo de Belén Martínez, una autora gaditana que escribe con mucha delicadeza, ternura y nos invita a reflexionar sobre temas duros y que, gracias a sus historias, alcanzan un poco de visibilidad y nos sensibiliza para luchar contra las injusticias e, incluso, hacer algo para evitarlas. 

Esta novela comienza con un elemento sobrenatural muy original que es una luna de sangre, causante de que nuestro protagonista pueda regresar al pasado y reescribir su historia y la de sus propios amigos. De esta forma, la trama está ambientada en el instituto y transcurre en 2008. Desde el principio, me surgieron muchos interrogantes que necesitaba resolver a lo largo del libro, lo cual me mantuvo totalmente expectante a cada comentario, actuación o paso sospechoso que daban los personajes. No esperaba encontrarme con una novela tan intrigante y que me planteara tantas cuestiones, pero la verdad es que he acabado reviviendo muchas experiencias olvidadas de instituto junto a este grupo de adolescentes tan reales, con miedos e inseguridades que, de alguna manera, determinarán su futuro. 

Indudablemente, uno de los puntos fuertes de este libro son las relaciones. Es cierto que la historia de amor es preciosa por cómo surge, la cercanía y la adorabilidad de sus protagonistas, pero personalmente me quedo con las relaciones de amistad por sus muestras tan leales, honestas y sinceras. Me ha parecido increíble cómo cambian los personajes cuando se conocen más a fondo, los nuevos vínculos que se establecen y hasta el punto que puede llegar el ser humano por ayudar a alguien a quien quiere.

Otro punto meritorio es la parte reflexiva. La premisa de este libro ya te da que pensar sobre si nosotros mismos reescribiríamos nuestra propia historia si tuviéramos la oportunidad. En mi opinión, es una cuestión que todos nos hemos planteado alguna vez y que seguramente cambiaríamos algunos detalles del pasado teniendo conocimiento de lo que ocurrirá en el futuro. Sin embargo, cambiar el pasado no significa que el futuro sea mejor o puedas evitar lo que quieras, ya que las consecuencias son imprevisibles. Por ello, considero que este planteamiento es muy interesante y que ha dado mucho juego en esta novela a la hora de descubrir lo que ocurrió, a la par que te intriga saber si finalmente Julen podrá reescribir la historia. 

En esta línea reflexiva también me ha resultado muy interesante el mensaje general que lanza la autora en el que entre todos deberíamos cambiar el sistema. En cierta manera, me recordó a Por trece razones porque al final todos somos culpables por permitir episodios de homofobia, racismo o maltratos. En ese sentido, en esta obra se refleja cómo hay compañeros y profesores que permanecen impasibles ante el bullying, la violencia o los insultos.

Narrado en la voz de Julen, me ha encantado leer esta novela porque su escritura tan fluida y delicada engancha tremendamente. Aparte, es un libro que desde el principio suscita muchísima intriga, te mantiene en tensión y hace derramar alguna que otra lagrimilla por su carga emocional. A mí, por ejemplo, la nota final de la autora me impactó muchísimo y me llegó directamente al corazón, al igual que algunas escenas duras y dramáticas.

En definitiva, Cuando reescribamos la historia es una novela juvenil intensa, intrigante y dramática que te invita a reflexionar sobre temas duros, pero también esperanzadora por el poder de la amistad, el amor y la superación personal.