Creo en una cosa llamada amor

Libro: Creo en una cosa llamada amor

Título original: I believe in a thing called love
Autora: Maurene Goo

Género: Young adult

Traducción: Ana María Pérez
Editorial: VR Europa YA (junio 2020)
Año: 2017

Origen: EEUU
ISBN: 978-84-120950-4-3

Páginas: 320

Puntuación: 6,5

Reseña: Desi es una estudiante que saca buenas notas y vive feliz con su padre. Sin embargo, no le va muy bien en el amor. Así que cuando Luca llega al instituto, decide trazar un plan para conquistarlo. El problema es que Des seguirá los pasos de las series coreanas para enamorar al chico que le gusta y, a veces, no le dará los resultados que ella esperaba.

Estamos ante una novela young adult con un estilo muy fresco y ligado directamente al mundo de los doramas coreanos. En cierto modo, me recordó al libro A todos los chicos de los que me enamoré por la premisa y ambientación del libro, ya que ambos se centran en historias de amor de instituto, aunque luego cada uno toma su propio rumbo. 

En principio, el argumento de esta novela es bastante sencillo, ya que nos cuenta la historia de cómo Desi intenta conquistar al chico que le gusta haciendo uso de los pasos que dan en las relaciones de los doramas coreanos. Si os soy sincera, la idea de replicar los pasos de los doramas coreanos me pareció algo absurda como estrategia para ligar, pero luego pensándolo mejor cuando somos adolescentes actuamos de forma incomprensible e incluso recurrimos a consejos de revistas o amigos que se creen unos expertos en el amor. Por ello, las situaciones que se crean son muy divertidas y, aunque no es la guía perfecta para conquistar a un chico, al menos sirve para que tu enamorado se de cuenta que existes.

En referencia al romance, es cierto que al principio me costó visualizar a los protagonistas como pareja, ya que Des parece estar atrapada en un mundo de ficción, más que en disfrutar de su propia historia de amor. Algunos pasos son inconcebibles porque son formas de meterse en auténticos aprietos o incluso rozan el peligro. Sin embargo, Des está tan confiada y obsesionada con su estrategia infalible que ninguno de sus amigos consigue que entre en razón, si no todo lo contrario, optan por ayudarla. En cuanto a Lucas, no lo conocemos muy a fondo hasta la mitad del libro y, sinceramente, a simple vista me dio la impresión de que no estaba muy interesado en Des. No obstante, más tarde hay un acercamiento, pero a mí me faltó más chispa en la pareja.  

Aunque la mayoría de personajes son adolescentes, me ha resultado curioso que no tienen ningún tipo de maldad, son inocentes e incluso se caracterizan por un toque infantil muy tierno. Como figura destacable, el padre de Des es absolutamente adorable por la relación tan bonita que tiene con su hija y ser el típico progenitor que vemos en los doramas que tanto le gustan. Los amigos de Des también aportan la nota de color a esta historia, ya que siempre están a su lado ofreciéndole consejos, apoyándola y participando en todas sus locuras. 

Narrada en primera persona en la voz de Des, en esta novela encontramos un estilo muy fluido porque contiene un lenguaje cercano y abundan los diálogos. Además, lo que más me ha gustado es la proyección cultural coreana, ya que he disfrutado muchísimo cuando Des comenta con su padre los doramas o menciona alguno que he visto o conozco de oídas. Por supuesto, también me ha hecho mucha gracia que, al fin y al cabo, es una forma de parodiar lo que ocurre en los doramas y refleja a la perfección que lo que ocurre en la ficción y parece tan maravilloso, cuando lo aplicas en el mundo real puede llegar a resultar un auténtico desastre.

En definitiva, Creo en una cosa llamada amor es una novela fresca, adorable e ideal para amantes de los doramas coreanos porque contiene muchos guiños y conserva ese estilo tan divertido y chispeante. Un libro young adult ligero, distendido y cómico para disfrutar en una tarde de piscina.