Como podéis ver, hemos cambiado el diseño del blog. No ha sido una decisión premeditada, más bien surgió por la curiosidad de qué plantillas habían disponibles por internet y, finalmente, acabamos cayendo en la tentación y haciendo un lavado de cara.
Siguiendo nuestras preferencias, hemos optado por un diseño sencillo y minimalista, ya que no nos gusta recargar el blog con detalles que desvíen la atención del lector. Estamos muy satisfechos con el resultado, lógicamente no es el trabajo de un profesional pero, nos sentimos muy orgullosos de ser nosotros mismos los que, desde sus inicios, le hemos dado forma y color a nuestra particular estantería.
Esperamos que también sea de vuestro agrado.